24 de enero de 2009

Reacciones desproporcionadas

Israel cae mal en Occidente. En Occidente hay ciertos tópicos que se mantienen contra viento y marea: 1) El Che Guevara fue un pacifista convencido; 2) Estados Unidos es el país más malvado que existe; 3) Israel asesina con la connivencia de Estados Unidos.

Hay que recordar que Israel es la única democracia de la zona. Compárese con Egipto donde
Hosni Mubarak es presidente desde 1981. O el sirio Hafez El Asad que fue presidente desde 1970 a 2000 y a quien le sucedió su hijo. ¿Es democracia un presidente que está 30 años en el poder y a quien le sucede su hijo? ¿Qué se diría de Estados Unidos si un mismo presidente llevase 30 años gobernando?
Israel es un país en que el presidente del gobierno Moshe Katsav fue acusado de acoso sexual. ¿Sería procesado un primer ministro o un presidente de otro país de la zona por una causa semejante?

Israel es un país que tuvo una primera ministra, Golda Meir, desde 1969 hasta 1974; compárese este hecho con la situación de la mujer en el mundo árabe.

Israel tiene un jugador árabe de fútbol como una de sus máximas estrellas: Abbas Suan. Israel es un país en el que existe, desde 2006, una ley de parejas de hecho, mientras que en muchos países árabes la homosexualidad es delito. También se permite que los homosexuales adopten niños.

Israel tiene un ministro de Ciencia, Cultura y Deporte que es árabe:
Raleb Majadele

Israel tiene un árabe que es juez del Tribunal Supremo: Salim Joubran

Israel es un país que ha multiplicado su PIB en un 60% en 60 años. Tiene más de 300 empresas en el sector de la tecnología. Israel tiene una densidad de empresas de tecnología sólo superada por Sillicon Valley en California. Además, después de Estados Unidos y Canadá, es el tercer país con más empresas listadas en el índice tecnológico Nasdaq de Nueva York, con 100 empresas.

Decía Golda Meir, la que fue primera ministra, que los palestinos odian más a los judíos de lo que aman a sus hijos. Por eso a los fundamentalistas islámicos no les importa engañar a un chaval desde pequeño y matarlo en nombre de la causa palestina o cualquier otra causa. No hay que olvidar que Hamas no representa a todos los palestinos. Hay quienes votan a Al Fatah. Por esa razón, Riad el Malki, ministro de Asuntos Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina ha dicho en esta entrevista que “a Hamas no le importan los muertos. Hamas quiere el control de la frontera con Egipto”. Y por esta razón ha habido palestinos que han colaborado con el ejército israelí al objeto de acabar con Hamas.

No todos los muertos son iguales. Los muertos palestinos venden mucho y bien en los telediarios. Pero, cuando los muertos son otros y son muertos como resultado de matarse entre ellos, no tienen cabida en los telediarios. Recuérdese lo que está pasando en el Congo. Ni el presidente dice nada, ni los actores firman manifiestos exigiendo el cese de las hostilidades en el Congo. Si leen la noticia, verán que la información la da Cáritas a través de una Radio Congoleña. En el Congo no hay despliegue gigantesco de la CNN, ni son muertos lo bastante importantes como para figurar en las portadas o en las recogidas de firmas de los actores o intelectuales. El intelectual: aquel que hace de su vida el pensar sobre lo humano y lo divino. Como si un físico nuclear, un geólogo o un mecánico de coches no pensasen.

Como tampoco hay manifestaciones, ni comunicados conjuntos ni nada parecido, cuando se matan en Darfur. Ahí cuesta más elegir entre buenos y malos. Son negros matando negros. El complejo de culpa de Occidente no funciona aquí. Da igual que se lleven matando desde 2003. Como tampoco les importaron jamás los 13.000 muertos en la guerra civil en Nepal. Seguramente ni saben dónde está Nepal y Darfur. El domingo 11 de enero de 2009 hubo una manifestación de pacifistas que terminó con pedradas contra la embajada de Israel y donde se quemaron banderas israelíes. También hubo manifestaciones a favor de Israel en varios países de Europa, aunque, curiosamente, apenas tuvieron eco en los medios de comunicación españoles. La manifestación era por la paz y por eso incluyó a destacados pacifistas como Juan Ignacio de Juana Chaos quien asistió a la manifestación que tuvo lugar en Belfast. El periodista Santiago González recuerda en su bitácora el momento en que el periódico El País también tildaba a De Juana Chaos como hombre de paz. Y en otra entrada recuerda que no solo la izquierda española se puso sobre los hombros el pañuelo palestino. Ya lo había hecho antes Arnaldo Otegi.

La imagen de los niños muertos es muy usada por Hamas para atraer la atención del mundo sobre la guerra en Gaza. Pero nadie se manifiesta, ni se menciona la palabra genocidio cuando los muertos los causa Hamas a Al Fatah como ocurrió en la guerra civil de 2006. Es decir, cuando son palestinos quienes matan palestinos. Nadie se manifestó en Madrid por los 700 muertos de esa guerra, ni por los 170 ejecutados que Hamas infligió a la Autoridad Nacional Palestina. No hubo fotos de niños muertos, ni banderas palestinas quemadas, ni gritos de genocidio. Porque cuando el supuesto débil machaca al supuesto débil: no hay dolor de Occidente. Porque es el eterno complejo de culpa de Occidente el único desencadenante de estas manifestaciones. Porque solo hay manifestaciones cuando el fuerte machaca al débil. Si el débil mata al débil, a nadie le importa. El uso y la manipulación que Hamas y los palestinos en general hacen del valor de las imágenes en Occidente son legendarios. Ya se ha acuñado el término “Pallywood” un cruce entre Palestina y Hollywood.

Existe un clásico documental sobre cómo utilizan las lágrimas de Occidente y sus 3 minutos de gloria en los telediarios. De igual manera que en 2006, durante la guerra entre Israel y el Líbano, se produjo el Reutersgate. Uno de los fotógrafos de la agencia Reuter, Adnan Hajj, había manipulado varias imágenes tomadas en Beirut con el fin de incrementar la maldad de los bombardeos israelíes. A Hamas no le importa demasiado la vida de los palestinos. Por esa razón coloca polvorines y depósitos de armas en edificios civiles, hospitales, escuelas o mezquitas. No quiere salvar la vida de los otros palestinos, sino dañar hasta el máximo la imagen de Israel a fin de destruirla. ¿Qué diríamos si Marruecos lanzase cohetes sobre Ceuta o Melilla y los militares españoles colocasen sus defensas junto a hospitales o colegios? ¿Qué pensaríamos si los depósitos de armas del Ejército Español estuviesen en medio de las ciudades al lado de los edificios donde viven civiles? ¿Seríamos tan pacifistas si Marruecos lanzase cohetes sobre Ceuta y Melilla?

Hay en Occidente un pensamiento que se pone del lado de causas que jamás toleraría si ocurriesen en su propio campo. El 23 de enero de 2009 Hamás lanzó misiles desde el edificio de prensa internacional en Gaza. Una periodista de Al-Arabiya relata -creyendo que las cámaras no grababan- cómo Hamas usa instalaciones civiles para lanzar misiles contra Israel. Incluso se ríe. Y en ocasiones disparan cohetes desde escuelas. Hay un engaño lingüístico constante cuando se habla de la guerra en Gaza. Muchos políticos españoles llaman “conductas irresponsables” a que Hamas lance cohetes sobre Israel. Y a que Israel conteste se le llama “reacciones desproporcionadas”. Es un uso lingüístico manipulador hablar de “desproporción” porque jamás las guerras fueron proporcionadas.

Quizá Darío III fue desproporcionado cuando opuso 1 millón de hombres a los 35.000 que Alejandro Magno llevaba consigo al invadir Persia. Quizá Jerjes fue desproporcionado al invadir Grecia con 2 millones de hombres. Quizá los legionarios romanos fueron desproporcionados al matar a 25.000 soldados de las falanges macedónicas, mientras que ellos apenas llegaron a 1.000 bajas en la batalla de Pidna. O quizá fueron desproporcionados los alemanes al invadir Polonia con sus divisiones Pánzer, mientras que el ejército polaco aún tenía caballería.


Las guerras no son proporcionadas. Por eso son guerras. Si queremos proporción hemos de buscar en el deporte con boxeadores que compiten por pesos o hemos de buscar en las pruebas de ingreso a la policía en las que los exámenes físicos para mujeres son más fáciles para que sean proporcionados. Las guerras son guerras en las que el más fuerte gana. Vivimos tan conmocionados por las escenas de los telediarios que de una obviedad hemos hecho un descubrimiento. Durante los últimos bombardeos, Israel mató a Nizar Rayan quien había encabezado la campaña de usar civiles palestinos como escudos humanos. Sugirió colocar palestinos –mujeres y niños- en los tejados de las casas de los dirigentes de Hamas para protegerlos de los israelíes. El propio Rayan murió dentro de su casa en la que se hallaba escondido junto a toda su familia. Esto muestra que a los dirigentes de Hamas les importa más destruir Israel que la vida de sus conciudadanos. Lo vital para ellos es destruir Israel: si para eso mueren miles de palestinos, es cosa nimia. No sé ustedes, pero yo no me escondería en una casa con mi familia si supiera que yo era un objetivo militar. Me alejaría y, quizá, daría la cara a fin de salvar a mis seres queridos. Pero Hamas sabe que un niño muerto es la cabecera de un telediario. Hamas sabe que militarmente no puede derrotar a Israel, de modo que necesita víctimas con las que ganar la batalla de los medios y la opinión pública. Nizar Rayan no estaba luchando con un fusil en la mano, sino que se escondió en su casa junto a su familia porque sabía que venían por él y así tendría un montón de valiosos mártires.

19 comentarios:

Anónimo dijo...

Joder tio, te tengo por un hombre inteligente, y eso es parte por lo que te aprecio tanto, pero con este texto... es la mejor descripción de la situación que he leído y estoy de acuerdo contigo al 100%. Mándalo a los periódicos, a las radios, ojalá alguno lo tenga en cuenta.

Por fin alguien que piensa en este país.

Un abrazo

Juan Pablo Arenas dijo...

La masa de información con que se nos bombardea con todo lo que tenga que ver con Tierra Santa hace difícil pensar con claridad. Hay demasiados datos y demasiada pasión, demasiada manipulación y demasiada demagogia barata. He intentado ordenar datos a fin de aclararme yo y de que, ojalá, alguien consiga aclararse. Me alegro de que haya servido para algo. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Hola,

pues parece que hemos descubierto que no nos importa lo que no nos incumbe directamente: somos cómodos y no nos interesa verificar o contrastar las informaciones que son lanzadas por la red informática. Pensar por uno mismo comporta demasiado esfuerzo.

Es una lástima que no se imparta "tratamiento mediático" como sujeto obligatorio en las escuelas: nos ahorraría muchos disgustos.

Abrazos juanoferanos.

Juan Pablo Arenas dijo...

Nos termina importando lo que los medios quieren que nos importe, pero siempre siguiendo una máxima inexcusable: es horroroso cuando el supuesto fuerte es un abusón con el supuesto débil. Cuando el débil se carga al débil, no hay manifestaciones. Los 800 mil tutsis que mataron los oprimidos y nobles hutus, no le preocuparon a nadie. Aunque sí que me acuerdo de cuántos sabios tertulianos le echaron la culpa a Occidente -cómo no- por su salvaje colonialismo. Besitos, hombre de Juanofa.

Tobias dijo...

Buf JPdeO... el tema que tocas es de lo más retorcido y realmente me gustaría tener una opinión formada con respecto a él, pero ya no se qué creer y qué no.
No cabe duda de que Israel es en la zona lo que más se parece a nosotros. Quizás por eso mismo también seamos más exigentes con ellos que con los países que rodean, más retrasados en cuanto a civilización desde nuestro punto de vista. Si dos cazurros se destrozan a garrotazos, nos parece incluso curioso. Si nuestro vecino tan parecido a nosotros mata a su débil mujer, nos vemos reflejados en la brutalidad. Al ser más como nosotros, creemos que podemos influenciarlos más. O quizás nos fastidie ver que se comportan de una manera de la que nosotros no nos quisieramos comportar y que no concuerda con nuestra imagen de civilización.
En realidad, está claro que no se puede extrapolar todo lo nuestro a lo de más allá. Jugamos a ser los democratizadores del mundo, como si a alguien que se tiene que esconder de balas y preocupar de que no le maten a la familia le importa mucho a quién votar. Y cuando por fin van y votan, pues votan a los que no nos parece bien que voten. Pues vaya democracia, no?
Está todo lleno de contradicciones, nada allá tiene sentido en mi cabeza limitada.
Complejo de culpabilidad... Esta vez algo justificado, si se ve cómo se formó Israel. Reino Unido y la ONU (quién parte la pana en la ONU?) jugaron sus papeles importantes.
Otra pregunta que se me planteo: Con la manía que en occidente ya le tienen a Israel, me imagino que habrán sopesado alguna vez la relación coste/beneficio de una solución final, exterminando del todo al enemigo. Mal rollo durante un tiempo, pero se acabaron los problemas. No?
Realmente me gustaría aprender más, poder formarme una opinión, pero en este caso mi escepticismo hacia todas las informaciones que vienen acerca de la contínua guerra allá es total. No me creo ya nada de nadie, todos pufean.
El otro día estuve viendo este video:
http://video.google.com/videoplay?docid=-4285834240977078626&hl=en
Los autores me suenan a árabes y hay mucha edición profesional, con lo que ya me temo el sesgo. Pero también hay datos y algunos son bastante lógicos. Si realmente la distribución de territorio en Cisjordania es tal como la pintan, es de esperar que la gente que la padece explote por algún lado.
En fin, lo único que se de esto es que ignoro demasiado y me cuesta meterme porque me repele lo que se hacen en nombre de no se qué derechos divinos.
Me voy a sobar. A ver si aprendo algo de esto con interesantes comentarios por aquí. Un abrazo!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Yo no creo que les exijamos más porque sean de los nuestros. Creo que simplemente Occidente vive horrorizado por las imágenes de la violencia desde Vietnam. Cualquiera que enarbole el cadáver de un niño lleva las de ganar: la culpa es muy productiva. Desde que Estados Unidos perdió aquella guerra, toda imagen de niño calcinado nos aborrece. Y no creo que sea malo que nos afecte. Lo que yo veo es que las razones que nos llevan a aborrecer esas imágenes son torcidas, tendenciosas y equivocadas. Cuando fui a la manifestación a favor de Israel me crucé con grupos de antisistema en el metro –pañuelo palestino, camiseta del Che- que iban diciendo las ganas que tenían de ir a Cuba de viaje de fin de curso: el único país donde el comunismo se mantiene auténtico. Se la suda que en Cuba se encarcele a maricones, disidentes y cualquiera que le tosa a Fidel. Cuba es el paraíso, según ellos. Ante esto solo puedo ver ignorancia o estupidez o las dos cosas.

Yo me pregunto cuál sería la reacción de cualquier país, digamos: Francia, China, Rusia, Inglaterra, si el vecino de al lado les tirase cohetitos. En España no haríamos nada, pero aquí somos distintos. Lo lógico es defenderse. Lo ilógico es poner la otra mejilla. Nuestra imagen de civilización, en muchos casos, es una visión anestesiada que ha olvidado de dónde viene. La libertad, desgraciadamente, se defiende con armas también. Los amables ciudadanos que defienden a Hamas, no se dan cuenta de lo que defienden. Hamas y la mayoría de los países islámicos, ni creen en la separación de poderes, ni creen en los Estados, ni creen en nada de lo que para nosotros son valores importantes. Creen en la unión absoluta de religión y estado. Quieren califatos igual que hace siglos.

Yo encuentro lógico que se ponga en duda la calidad de una elección democrática si ese candidato elegido va en contra de mí. Y lo mismo me vale para el País Vasco, para Palestina, para Cataluña o para un imán de una mezquita de Londres. Porque, si no, nos hallamos ante el absurdo respeto absoluto. Igual que no respeto a un idiota que le quiere cortar el clítoris a mi novia, no puedo respetar a quien vota la irracionalidad y la vuelta a la caverna. Me niego a respetar eso. Lo decía Rosa Díez el otro día. ¿Respeta usted todas las religiones? No. Solo aquellas que no van en contra de mis principios y que no lapidan a las adúlteras y no ahorcan homosexuales. Las consecuencias de unas elecciones en un territorio musulmán va más allá de lo puramente anecdótico. No es como votar a un alcalde del PP o PSOE en un pueblo andaluz. Las implicaciones son peores. Quizá nosotros nos podamos equivocar al censurar sus urnas y votaciones, pero al menos aquí los poderes se vigilan entre ellos y los periódicos vigilan al más poderoso, cosa que allí no existe.

He visto parte del documental y tiene sesgo. Me gustaría que mencionaran todos los muertos que ocasionan los islamistas cuando les da por poner bombas, tanto en Madrid, Londres o Tel Aviv. Y ya que hablan del Apartheid, podían hablar de los negritos de Soweto masacrando a los negritos de Namibia que venían a quitarles el trabajo. La imagen idílica del niño palestino tirando piedras a un tanque israelí es preciosa, pero también deberían incluir al palestino que se cuelga 50 kilos de dinamita en el pecho y se sube a un autobús israelí. No creo que Hamas sean más buenos, sino que son más torpes. Si tuvieran un misil nuclear no dudarían en lanzarlo en medio de Jerusalén aunque mataran a miles de árabes. Y en la formación de Israel no hay que olvidar los pogroms. Toda Europa perseguía judíos a principios del siglo XX y la mayoría se fueron para allá huyendo de aquí.

Además, el rollo de árabes oprimidos y judíos crueles, no se lo cree nadie. Busca información sobre los 25.000 palestinos que el bueno y endiosado Hussein de Jordania –árabe hasta el tuétano y que tan buena prensa tenía en Occidente- mató en septiembre de 1970. Si los países árabes de la zona no han aniquilado a Israel, no es porque respeten su derecho a existir, sino porque no han podido. Es bastante más fácil ser árabe en Israel que judío en un país árabe.

Pero creo que la razón de peso por la que me tengo que poner del lado de Israel en esta guerra es porque sé que en cualquiera de esos oprimidos países árabes yo ya estaría muerto o en la cárcel por la sarta de gilipolleces que escribo aquí.

Un abrazo súper Tobías.

Anónimo dijo...

A Hamas le importa un pimiento los palestinos, y a Israel también: ese es el drama. Alá es grande y Yahvé lo parece. El problema son sus siervos, que son todos unos hijos de puta. Si a eso le sumas el vil metal y la mala conciencia del mundo incivilizado que martirizó durante siglos a los judíos(a los que se ha otorgado "patente de corso" para hacer lo q les salga del sabat); hacen de ello un cocktail apocalíptico. Es lo que hay. En Tierra SAnta las ostias van que vuelan desde siempre. No hay nada que hacer ahí, es un ojo por ojo eterno hasta el punto de que ahora mismo no sabemos quien vino primero: si el huevo o la gallina. Esos taraos se retroalimentan, y aquí, como somos gilipollas y lo simplificamos todo, nos enredamos en manifas a favor o en contra, separados entre buenos y malos según sea yo un "liberal" o un "progre". Lo curioso del asunto es que los defensores del laicismo se alinean con los integristas islámicos; mientras que entre los defensores a ultranza de Israel están los que quieren canonizar a Isabel la Católica, la misma que limpió España de judíos. Joder que extrañas alianzas jajaja Eso es coherencia, sí señor. En fin, creo que Lenin se equivocó cuando dijo aquello de que "la religión es el opio del pueblo". No es el opio, es el estimulante, pura anfetamina.
El otro día un colega que estuvo en la manifa de Barna me preguntó xq no fui, y yo le dije: "porque me importa un rábano lo que pase en oriente próximo, además yo voy a favor de los judíos." Los que habían a mi alrededor me miraron como un bicho raro, y me dijeron "¿Cómo puede ser?"...Y les contesté: "pues xq sí, xq tengo rasgos judíos, xq las raíces de mi apellido son judías (mentira podrida), xq estoy operado de fimosis y xq me gusta llevar la contraria." "Eres un frívolo insensible" me dijeron. "Es que soy ateo" les contesté para decirles finalmente que: "cuando llegue el día del juicio final, estoy seguro de que los palestinos y los israelíes seguirán arreándose en la cabeza. Así que prefiero no perder el tiempo en ir a una manifestación, hay cosas más interesantes que hacer"...
Por cierto, soy el Timbaler del Bruc. Un saludo

Juan Pablo Arenas dijo...

La historia arranca de atrás. Como los evangelistas tenían que propagar sus ideas dentro de un mundo romano, no estaba muy bien visto poner a caer de un burro a los romanos, quienes aguantaban muy bien todas las religiones pero algo peor la disidencia política. Y unos evangelios que hablasen de maldad romana era disidencia política. La subversión religiosa les traía al fresco a los romanos que tenían la Ciudad Eterna plagada de dioses y templos. A Cristo lo mataron los romanos porque estaban hasta el gorro de tanto mesías sedicioso y levantisco. En la época había cientos de ellos, como genialmente se ve en La Vida de Brian. Pero Cristo armó más camorra de lo habitual y lo eliminaron. Los trabajos de Antonio Piñero y Gonzalo Puente Ojea lo han demostrado hace tiempo. Los judíos ni pinchaban ni cortaban pero se llevaron la mala fama durante siglos. Aguantaron de todo y más. Pero no hay que olvidar que los judíos fueron expulsados de Inglaterra y Francia siglos antes que en España, como ya escribí en su momento.

http://juanpabloarenas.blogspot.com/2008/02/judos.html

Y es cierto que fueron los Reyes Católicos los que llevaron a cabo la expulsión, pero la limpieza étnica se practicaba en toda la Península: moros contra judíos, judíos contra moros, cristianos contra todos…La convivencia idílica de las 3 culturas es una chorrada que se inventaron los románticos del XIX. Si ahora nos llevamos mal, imagínate hace 5 siglos. Y no viene mal recordar que el primer territorio español donde hubo Inquisición antes que en Castilla fue la Corona de Aragón, la cual tuvo un ínclito inquisidor en la figura de Raimundo de Penyafort que era hábil en eso de andar purgando moriscos y judíos.

Yo no creo que a Israel se le deje hacer por nuestra mala conciencia. Yo creo que se les deja hacer porque es el único reducto de libertad dentro de esa jaula de pirañas que es Oriente Medio. Pero tienen coña marinera las simpatías que tú señalas. Aunque creo recordar que la izquierda apoyó la creación del estado de Israel en su momento. Aunque después de ver al presidente Zapatero decir que Obama es socialdemócrata: todo puede ser.

Sí, sí: te pasa como a mí. Cuando yo hablo de que estoy a favor de los judíos me miran como a un leproso. En la conciencia de Occidente es un dogma religioso –cómo no- que lo moral es apoyar al palestino. Y es cierto que nuestra civilización tiene más que ver con los judíos que con los árabes: lo grecolatino se empapó de la Biblia. Pero en un sistema educativo que no enseña nada, llegará un día en que, al ver el Cristo de Velázquez, los niños preguntarán quién es ese señor crucificado.

Un abrazo Timbaler, y a ver cuándo nos cuentas esa magnífica historia de esos catalanes aguerridos que acojonaron a los franceses a golpe de tambor.

Tobias dijo...

La división de 'o estás conmigo o estás contra mi' me parece como poco infantil. Me identifico más con la forma de vida de Israel que con la de cualquier país que lo rodee, no hace falta que me convenzas de eso. Eso no quita que discrepe de algunas cosas que hacen y no significa que 'me pongo del lado de los palestinos.' Los americanos que se manifestaban contra la guerra de Irak o Vietnam eran 'antiamericanos?' Querían que su país perdiese sus guerras?
Lo que yo digo es que o me he tragado un bolo o no se dan las condiciones mínimas para que pueda nacer prosperidad en Palestina. Y si alguien no tiene nada que perder, pues no le jode tanto acabar reventándose con un cinturón de goma 2 en un autobús. Lo que parece claro es que hace 70 años allí vivía una gente. Esa gente ha sido echada y ahora vive de tal manera que no puede desarrollarse ni generar un poco de bienestar. Además, de vez en cuando, en venganza por lo que algunos de sus chulos hacen a los que les han echado, van estos, que son más fuertes y arrasan lo poco que tienen y con suerte a algún familiar querido. No crees que en una situación similar te revolverías con uñas y dientes? Me pongo en el pellejo de los israelís. Pero también en el de los palestinos. En el de la persona de a pie. Igual una partición de la tierra que permita construir algo de valor que les importase perder ayude a reducir fanatismo. Me piro a patinar. Sigamos ;) Un abrazo!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Sé a que te refieres con la división infantil. Pero yo creo que en ciertos asuntos sí que es sana una buena dosis de maniqueísmo. Por ejemplo, no creo que con el terrorismo de ETA valgan las medias tintas o las posturas matizadas. Por supuesto que se puede discrepar de lo que hace Israel, pero resulta muy difícil con la manipulación que hacen los medios. ¿Por qué tienen tanto pudor de enseñar descuartizados por accidentes de tráfico, o los que se tiraban desde las Torres Gemelas o los reventados por el 11-M? ¿Y en cambio les encanta enseñar los niños muertos de Palestina? Muchos americanos se alegraron de que Estados Unidos perdiese la guerra. Hay una confluencia de odios, de fobias y obsesiones en cierta Extrema Izquierda, en el Populismo de Chavez, en el Indigenismo de Morales, los antisistema, los antiglobalización y el islamismo radical. Todos coinciden sin darse cuenta quizá: odian el mercado, odian la democracia, odian a Estados Unidos, odian los valores de Occidente. Pero claro: critican desde dentro. Ninguno se va a vivir a Kabul. Todos critican desde casitas calentitas con petróleo extraído por las empresas que tanto odian. Como el genial Nicolas De Geneva, que es profesor en la Universidad de Columbia y que dice que ojalá los soldados yanquis sean masacrados y que la bandera de Estados Unidos representa el fanatismo. Eso lo dice desde su calentito despacho y con policías y jueces que salvaguardan su integridad. Ninguno se va a vivir a Afganistán o Siria. Qué levanten allí la voz. En Venezuela hay oficinas de Hamas y Hizbulá y ahora persiguen a los judíos venezolanos. Busca en Google los comunicados de las Juventudes Bolivarianas de Chavez elogiando a Hamas. Y no creo que los palestinos fueran más felices si de repente desapareciera Israel. Mira los otros países del entorno: están podridos de corrupción y pobreza.

Decir que partir la tierra les va a traer la paz es una utopía. Es la misma utopía absurda que defienden los etarras, que con su cacho de tierra serían felices. Mentira: serían igual de fanáticos. Los países árabes tienen sus enormes pedazos de tierra y en todos ellos reina la falta de libertad, el fanatismo, la pobreza y la corrupción. Son los ideales puestos en práctica de manera eficaz los que construyen naciones prósperas, y no los terruños.

Tampoco se llevaban tan bien antes de que llegasen los judíos. Había cristianos y árabes conviviendo malamente. Pero darle vueltas a eso es lo mismo que decir que los íberos estaban muy tranquilos antes de que llegasen los romanos. Quizá. El caso es que llegaron.

Tobias dijo...

Admitida a trámite la puya: donde dije americanos debí haber puesto norteamericanos. Así se entiende mi argumento mejor.
No me perece justo cuando usas el terrorismo de ETA como ejemplo de caso en el que no hay que andarse con medias tintas. El terrorismo de ETA es de ETA. No por eso entras en el País Vasco y te cepillas todo lo que veas. Sin fisuras contra el terrorismo, también el palestino. Pero con fisuras cuando te cargas a todos los demás. Además, me juego un pie a que si en el País Vasco la peña viviese como en Gaza, ETA tendría muuuucho más apoyo y activistas.
Darles su terruño no se si dará la paz, pero les permitirá prosperar dentro de los límites que ellos mismos se impongan, no otro pueblo. Los egipcios viven en su miseria, pero no por eso bombardean Israel, por lo menos desde que estos les zurraron bien la badana. Los egipcios tienen mucho que perder, han llegado a cierto nivel de prosperidad y se lo piensan. Los palestinos no tienen más que perder.
Llegaron los judios y formaron Israel, eso no se cambia, llegaron. Va la ONU, propone una división, para que vivan todos. No se realiza. Tienes a gente viva desplazada de su tierra (no compares con los íberos ni con los al-andalusís). Y tienes gente que no puede llegar a desarrollar un mínimo de bienestar, o así lo entiendo. No existe la infraestructura, los requisitos básicos. Es que creo que tú y yo también desesperaríamos.
Dales su terruño y que se las arreglen. O admitelos a todos dentro de tu país y con plenos derechos. O aniquílalos a todos. Pero qué solución ves si sin hacer algún gran cambio?

Juan Pablo Arenas dijo...

Yo no creo que Israel entre en Gaza y arrase todo lo que pille. Los israelíes avisan por teléfono móvil, teléfono fijo, y lanzan folletos desde el aire cuando van a atacar un edificio. Es la gente de Hamas quien hace caso omiso de las advertencias y así tener sus muertos para el telediario. Los israelíes evacuan a su gente cuando se reciba una alerta de cohete lanzado por Hamas. Yo creo que la comparación con ETA es pertinente en muchos casos. Ya no digo bombardear pero ha habido mucha mano blanda y mucha dejadez. Los etarras de hoy son los niños que han crecido en las ikastolas al amparo del alimento ideológico del PNV. Y ha habido muchas medias tintas como cuando mataron al empresario Ignacio Uría y la familia tuvo la desfachatez de leer un comunicado en que reprochaban que matasen a un vasco puro y del PNV. Vaya. Mientras mataban a los maketos traidores, a nadie pareció importarle. Por cobardía y dejadez se les ha dejado crecerse.

Si los vascos viviesen como en Gaza tendrían excusas de sobra para liarla parda. Pero viven mejor que nadie y contribuyen a la caja central menos que nadie. Total: para hacernos las víctimas siempre hay tiempo.

Y yo creo que los territorios ya los tienen. No se oye hablar de Cisjordania que es un territorio más grande que Gaza y donde se aguantan bastante bien. Por no hablar de todos los árabes que trabajan en Israel y que se valen de su sanidad y su protección social. Si la gente de Gaza vota a Hamas y aprueba sus métodos, pues allá ellos con sus consecuencias. Es como la gente que ahora votará a Hugo Chavez para que sea dictador perpetuo y luego a saber qué hará con todo ese armamento ruso que está comprando. ¿Tendrá la culpa Occidente de lo que hagan los venezolanos con sus votos?

Y te aseguro que la comparación con íberos no es tan alocada. Los romanos arrasaron y costó muchas guerras dominar la península. ¿No crees que hubo gente que sufrió y que preferiría que se hubieran quedadoen su casita? Claro que sí. Pero también hubo quien se alegró y disfrutó de sus acueductos, carreteras y leyes. Como bien se ve en La Vida de Brian. También hay muchos palestinos que están felices de vivir y trabajar en Israel aunque se les oiga menos.

La solución no la veo fácil. Porque por mucho que los palestinos se cansaran de lanzar cohetes y los israelíes los aceptasen en su seno, siempre estaría Ahmadineyad azuzando los rescoldos para proseguir con su destrucción de Israel. Hay un trasfondo ideológico del que muchos quieren sacar rédito. Estados Unidos quiere afianzar su posición en la zona y tener vigiladita a China. La mayoría de los otros quiere destruir Occidente porque lo ve como el colmo de la degeneración. Según ellos, el Islam es la solución.

Lúgubre futuro le veo yo a esto. Un abrazos súper Tobias.

Tobias dijo...

Vaya, pues qué mala suerte para las mil y pico víctimas civiles (creo que las cifras son palestinas, pero tampoco pudo entrar la prensa a cubrir el 'evento'). Igual es que tenían el móvil fuera de cobertura o los niños no sabían leer las octavillas, pero al menos parece que estos no lo cuentan.
No se si has visto entero el documental que te enlacé hace unos comentarios. Por si acaso aquí te mando el mapa de cómo está Cisjordania, fíjate en el segundo de la entrada: http://es.wikipedia.org/wiki/Cisjordania
Son parches inconexos de como mucho varios km x varios km. Si el desplazamiento entre ellos no es libre, ya me dirás si es realmente cierto eso de que se aguantan bastante bien. Lo peor de todo es mi incultura: Hasta que no vi el documental, yo creí que los palestinos campaban en Cisjordania a sus anchas, pero no es así.
Yo no se la solución y me huele que esto no la va a tener en mucho tiempo. Pero lo que está claro es que dejando las cosas como están no veo ninguna opción de vida normal para los pales y con ello ninguna opción de paz para los isras.
Más abrazos!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Entiendo la ironía de tu contador de muertos, pero en eso he de disentir de ti. Yo creo que, por sentido común, si yo le pego o provoco a un tío de 2 metros, nadie dirá que el otro me maltrata. Eso pasa todas las noches que salgo. El enano que le pega al grande y sale escaldado. Si además de eso, yo meto a mi familia y les pegan a ellos. ¿La culpa es del otro? Si tanto quiero y protejo a mi familia, lo primero que hago es no meterme en líos yendo con ellos. Te lo digo por experiencia: mi padre un día estuvo a punto de hacer que nos linchasen por embestir con su coche a un tío de dos metros que se le había colado. Mi padre le provocó y él se defendió, pero mi viejo, como muchos chulitos, se encontró con la horma de su zapato.

Nuestros pareceres son distintos. Tú ves a un fuerte que maltrata a un débil. Yo veo una guerra. Y en las guerras gana el más fuerte. Cuando los israelíes avisan de que van a atacar y el tal Nizar Rayan se encierra con su familia para que los maten, lo que busca es un gran número de víctimas para aparecer en la CNN. Le da igual que sus hijos se hagan mayores y tengan vidas felices. Y comentas con socarronería que los israelíes avisen, pero es más de lo que hace Hamas que no avisa cuando lanza sus cohetes.

Yo no creo en eso de las víctimas inocentes. Cuando el tremendo bombardeo de Dresde de la Segunda Guerra Mundial, se habló ya de las víctimas inocentes. Pues siento disentir. Las mismas froilain que estaban bajo los escombros, habían vitoreado y habían llevado en sus hombros a sus pequeños arios, cuando el tío Adolfo hacía sus desfiles, cruz gamada en ristre, y querían que el tío Adolfo los rozase para bendecirlos. Y sonreían y miraban hacia otro lado, cuando a los judíos los deportaban, les quemaban los comercios o les colgaban estrellas amarillas. Ellos escogieron al tío Adolfo. Las sociedades son tan culpables como los gobernantes. Por eso, yo creo: tenemos los gobernantes que nos merecemos y la televisión que nos merecemos, entre otras cosas. Si los palestinos votan a Hamas sabiendo lo que van a hacer, son mayorcitos para arrostrar las consecuencias. De igual manera que si mañana un Partido Carlista Marxista con un programa de invadir Francia gana las elecciones y la invadimos y los franceses nos zurran ¿Es culpa de Francia?

Es cierto que Cisjordania es un pedazo de tierra pequeño y desconectado. Pero hace falta muy poca tierra para ser próspero si realmente se desea. Mira el caso de Mónaco, Costa Rica, Singapur, las Islas Barbados, Liechtenstein. Supongo que ni a Andorra ni a Mónaco les dará por invadir Francia. Tienen leyes, las hacen cumplir e inculcan ciertos valores a sus ciudadanos. Cosa que Hamas no hace.

No pude verme el documental al completo. Prometo hacerlo este fin de semana.

Un abrazo de oso, Tobías.

elnaugrafodigital dijo...

Gracias, Juan, por la sugerencia. Me pasaré de vez en cuando. Un saludo sin vilipendios.

Tobias dijo...

Qué tal el fin de semana, JP?
Te dio tiempo a ver el video?
Algunas diferencias entre los ejemplos de estados pequeños y prósperos que mencionas:
- pequeños, pero conexos.
- crees que su prosperidad se debe al aislamiento? O igual la facilidad de interactuar con el entorno les ha ayudado en su prosperidad?
Respecto del tío de 2 metros al que pega el enano, igual también se puede ver de esta manera. Viene el tío de 2 metros, se mete en tu casa, se come tus espaguetis, se bebe tu birra y se cepilla a tu chorba. Igual también piensas en intentar meterle, aunque seas un canijo y él el de los 2 metros. Está claro que aquí no hay blanco ni negro. Pero buscando el blanco o negro es como menos se va a solucionar...
Abra azotes!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Querido Tobías:

El documental es tan tendencioso y tan ingenuo que resulta poco creíble. Todos sabemos que las conspiraciones son jugosas y que alimentan muy bien las tertulias. Yo también apoyo a Israel así que supongo que yo también soy sospechoso de pertenecer a un oscuro grupo sionista y que Estados Unidos me paga por hacerles propaganda. Todos saben las simpatías que la causa israelí despierta en Estados Unidos así que no sé a qué vienen tantas conjuras secretas.

Esto me recuerda a la de veces que me harté de oír en tertulias radiofónicas, con gente supuestamente preparada, que el Código da Vinci era una novela hecha con documentos ocultados por la Iglesia. JAJAJAJA, pero si los Evangelios Apócrifos tienen una preciosa edición hecha hace años por la Biblioteca de Autores Cristianos que es de la Iglesia. Pero no dejes que una verdad simplona te oculte una buena confabulación: que siempre vende más.

¿Ocupación? A mí el vocablo me da risa. Es el mismo, fíjate, que usan vascos y catalanes. ¿Hablamos de una ocupación? A ver si un día de estos me pongo a escribir sobre el sur de Estados Unidos que fue español hasta el siglo XIX y luego mexicano. ¿Sabes cómo dejó de ser español? Con colonos yanquis que venían a buscarse la vida y a por oro. Trajeron su modo de vida y su lengua y sus leyes. Por esa razón ya no se habla español sino inglés. Menuda ocupación fue esa. Y nada de unos cuantos kilómetros cuadrados, eran miles y miles de kilómetros cuadrados: desde Kansas hasta California, todo eso era español. Pero los españoles hicieron lo que han hecho otros pueblos en su situación: aprender inglés y buscarse la vida.

El documental se olvida de mencionar los pogroms que aniquilaron cientos de miles de judíos en Europa a principios del XIX. Que hablen con los rusos. Si la Rusia zarista no los hubiera usado como chivo expiatorio, no se habrían puesto a emigrar en masa.

Es muy bonito el rostro de un niño en cámara lenta con música monotonal y haciendo zoom sobre él. Todos los que hemos estudiado vídeo sabemos esos trucos. Pero no veo a los niños israelíes cuando los valientes gudaris de Hamas les matan a sus familias. Eso no sale. Eso no queda bien para el buenismo occidental. Salen los blancos haciendo apartheid pero no salen los negros matando negros en Soweto, porque eso no es maldad occidental. Salen los ingleses soltando candela en Belfast pero no salen los del IRA poniendo bombas. Salen los negros apaleados en EEUU, pero no salen los Panteras Negras. Salen los ingleses apaleando hindúes, pero no salen las matanzas que perpetraron los pakistaníes en Bangladesh. Solo sale lo que cuadra con la eterna maldad occidental.

Los valientes gudaris de Hamas que tanta conmiseración despiertan en Occidente son una gente que nos desprecia, que desprecia la democracia, que desprecia nuestro laicismo, que solo concibe la vida a través de la religión islámica, que llamarían putas a nuestras novias por ir con una minifalda y que nos destruiría si pudieran. No es la maldad israelí lo que se lo impide, sino su torpeza militar.

Pero da igual: los pacifistas propalestinos ya están entrando a golpe de bate en las sinagogas de Caracas y Barcelona. No pasa nada. Buen rollito. Se lo han buscado. No te preocupes que nadie entrará en una mezquita con un bate de béisbol cuando un gudari de Hamas se inmole en un mercado israelí.

Es la culpa: el eterno complejo de culpa de Occidente. Se lo merecen. Los israelíes se lo merecen. Lo mismo que me harté de oír cuando se caían las Torres Gemelas y los sesudos analistas repetían sin cesar: ¡¡ se lo merecen!! ¡¡Occidente se lo merece!! Un israelí muerto es una muerte merecida. Un palestino muerto es la pobre alma desvalida, pisoteada, oprimida, sojuzgada, tiranizada, dominada, subyugada, sometida, esclavizada por Occidente. Occidente es malvado y ahora ha mandado a Israel, su ángel exterminador, a limpiar Palestina.

Un abrazote Tobías. En Madrid ha vuelto a nevar aunque poco. Y eso que iba a ser el invierno más cálido.

Besitos.

Tobias dijo...

JP, aquí también está nevando, arrecian las ganas de ir a esquiar.
Respecto a nuestro debate particular, yo no te estoy intentando 'cambiar de bando.' Parece que aquí los dados están echados y no hay más que dos extremos válidos. No te propongo el vídeo, obviamente manipulador, para convencerte de que te enrolles el pañuelo palestino al cuello ni para que desenfundes la artillería de por qué somos más parecidos a unos que a otros. No cabe duda. Pero eso no significa que no nos equivoquemos en muchas cosas.
El video es tendencioso, pero no lo son todas las informaciones que recibimos acerca de este tema? Me encantaría tener una fuente que presente datos fiables y contrastables, pero me temo que está difícil. Tenemos que contentarnos con hacernos una idea de lo que desgranamos desde las informaciones manipuladoras. Yo con este vídeo aprendí la inconexión de los territorios palestinos en Cisjordania (y luego lo comprobé en la Wikipedia, aunque no fui más lejos) y me creo las dificultades de movimiento entre territorios. Con estas dos condiciones, deduzco que la prosperidad allí es muy difícil de alcanzar. Y basándome en eso argumento que alguien que no tiene mucho que perder es peligroso para el que, en ojos del desesperado, es culpable de su situación. Ni religiones, ni culturas afines, ni sistemas políticos.
Acerca del WildWildWest, la historia no es siempre un referente. Entonces se ahorcaba a la peña de un árbol. En España se usaba el garrote vil hasta hace no tanto. Pero ahora no. Las sociedades evolucionan y lo que antes era una conquista, ahora es una ocupación. Sobre todo cuando las imágenes en directo de las guerras ponen las acciones heroicas en perspectiva con lo que realmente es una guerra. Ahora todo el mundo tiene acceso a esas imágenes y por suerte las guerras tienen cada vez menos respaldo social. En 'All quiet on the western front'(1930) (http://www.imdb.com/title/tt0020629/) ya dicen los protagonistas que vaya absurdo es que los alemanes de casa animen a una guerra sin tener ni puta idea de lo que significa estar en el frente, matar sin saber a un tío que tampoco quería estar ahí, quitarle la cartera y ver la foto de su familia. Las escenas en cámara lenta de los niños llorando son conmovedoras y manipuladoras a la vez, pero mucho mejor que existan. Si ese niño no lloraba de verdad, seguro que muchos otros sí que lo hacían con razón.
En fin, opino que nosotros o los que son más como nosotros, pueden estar equivocados también. Y en ese sentido, creo que de seguir este camino, la solución más plausible es eliminar del todo el problema. Te quitas a todos los palestinos de delante, aguantas unos años de cabreo mundial y a vivir.
O también podríamos intentar buscar soluciones que mejoren la situación para los dos? Existen?
Pasa buen fin de semana!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Amado Tobías:

Ya sé que no me quieres cambiar de bandos. A mí me encanta que me lleves la contraria, me supone un desafío de lo más estimulante. Para que me den la razón y me digan cuán guapo soy, ya está mi mamá.

Me temo que en estos casos es difícil hallar posturas medias. Creo que, en muchas ocasiones, las posturas medias tienen más que ver con la falta de lecturas, la pereza o el afán del buen rollismo universal.

Yo creo que, más que tendenciosos, los informativos en el caso de lo que ocurre en Gaza son uniformes porque todos insistían en lo mismo: la arrasadora sevicia israelí. Al menos en España, todos decían lo mismo. Por eso saqué datos de periódicos israelíes e ingleses. Pero la información es siempre tendenciosa. Tengo detrás de mí los tropecientos volúmenes de la Enciclopedia Británica y no veas las tonterías que llega a decir, sobre todo, de los hediondos hispanos. Todo está tergiversado. Hay que aprender a leer y a ver entre líneas. Hay que potenciar al receptor y no preocuparse tanto de la maldad del emisor. La verdad objetiva está en la variedad de fuentes. Cosa que en España, donde la gente compra el mismo periódico que compraba su abuelo, es cuestión harto complicada. Lo mismo acaece con los votos, el cual es cosa de tradición familiar, como ser costalero. No puedes obtener información objetiva si los propios periodistas ya toman partido enseguida y se hacen corresponsales de guerra proclamando que son oenegés de la paz y el amor universales. Pandilla de hipócritas. Soy hijo de periodistas y soy periodista. Los conozco bien.

Yo no digo que las condiciones sean las más idóneas, pero ha habido sociedades que las han pasado perras y no se liaban a lanzar cohetes. Piensa en la España de la posguerra que a finales de los 70 era la novena potencia del mundo. Por encima de que los israelíes se lo pongan difícil, lo cual es lógico, hay un afán en los árabes de destruir Israel. Por encima de todo quieren arrasarlos y eso hace que los medios sean distintos. Cuando los sirios y egipcios atacaron a los israelíes en la guerra del Yom Kipur del 73, les dio igual quién cayese de su bando, pero la respuesta judía fue torpe y tardía porque su parlamento bloqueó el movimiento de soldados. Es la comparación de una democracia a unos países que no lo son. Los israelíes protegen a sus bebés y por eso no son noticia en la cabecera del telediario y por eso no salen los israelíes rasgándose las vestiduras con niños muertos en brazos de una madre plañidera. Los palestinos los ponen adrede, a muchos de ellos, para que mueran y salgan en las noticias. Como tampoco a los mandos, que ordenaban a los pilotos kamikazes del ejército japonés que se lanzasen sobre los barcos yanquis en Okinawa, les importaba la vida de sus pilotos. Lo importante era ganar la guerra. Está claro que es una virtud de Occidente mostrar esos niños en el telediario, porque también pueden mostrar a los niños israelíes muertos. Pero yo digo: ¿Qué información emiten los medios árabes en países que no son democracias?

Perdona, pero, para mí, la historia sí es un referente porque demuestra que en tiempos teóricamente más primitivos hubo pueblos que solventaron de manera más pacífica problemas similares. Además, mezclas el prejuicio de la pena de muerte. Creo que la pena de muerte es un mito de nuestros días. Todos dan por hecho que es algo feo y espantoso, sin mayor discusión. Nadie entra al trapo y aporta razones filosóficas que no sean cuatro ideas trilladas que más parecen salidas de la boca de un predicador que de un hombre leído. ¿No matarías a Hitler si tuvieras la oportunidad? Yo sí. ¿A dónde nos conduce tanta bondad universal? Creo que la pena de muerte es algo más serio de lo que parece y que habría que tratarla con más profundidad de lo que suele hacerse. Lo normal es desorbitar los ojos y tachar de loco a quien lo propone. Ni siquiera la discusión parece asunto interesante. La sola mención parece una pérdida de tiempo. Mucha frivolidad veo en ello. Las sociedades evolucionan pero también involucionan. Tenemos tan poco juicio crítico y tanta arrogancia que por vivir 2 siglos después de un hecho, lo despreciamos motejándolo como primitivo. Yo no creo que las guerras tuvieran mucho respaldo social antes. Tú te leíste la biografía de Alonso de Contreras. No había respaldo, había resignación. Las mujeres de los espartanos que fueron a dejarse matar en el Paso de las Termópilas los despidieron con lágrimas y no se alegraron de su muerte. La cuestión es que consideraron que había cosas por las que merecía la pena morir. Y creo que estableces una ecuación errónea de que rechazar la guerra es un signo de civilización. No olvides que la Alemania de Nietzsche, Hegel y Kant puso a Hitler en el poder. Siendo Alemania, seguramente, el país más culto de su época. La filología nació en Alemania. Los estudios bíblicos y mil cosas más.

La percepción de la violencia como suceso espantoso no es tan universal como pudiéramos creer, es una idea occidental de pueblos que viven bien y cómodos. Nadie niega que las guerras son pavorosas, pero pregunto yo: ¿seríamos tan calmados, pacíficos, ecuánimes si nos cayesen cohetes sobre la cabeza? ¿Lo serías tú? Yo ya digo que no. También había pacifistas en plena Segunda Guerra Mundial, que, supongo, querían acabar con Hitler a fuerza de manifestaciones con las manos blancas. George Orwell dijo que los pacifistas son, en el fondo, pro-fascistas. Y el vio las guerras de cerca. Aquí tienes el texto si lo quieres leer: http://www.orwell.ru/library/articles/pacifism/english/e_patw

No le veo una solución fácil a esto. Quizá lo que tú propones. Quizá no. No creo que eso jamás se calme. Y quizá sea la excusa para otra guerra mundial. Ni idea. Ojalá que no.

A cuidarse y mucho fornicio e intoxicación etílica.

Un fuerte abrazo, guapetón.
JP