31 de diciembre de 2010

Cruz




Nuestra zurcida Europa se hizo bajo una cruz. 

Aunque ya nadie parece acordarse de eso, Europa se hizo en nombre de una cruz. Y al decir Europa, se dice el resto de Occidente.

Occidente: un término desprestigiado en nombre del relativismo. O del multiculturalismo, ese otro término prestigiado. Como si fuera una situación nueva. Sería bueno que explicasen cuándo el mundo dejó de ser multicultural, para que se considere una novedad propia y exclusiva del siglo XX y del XXI. Quizá les suene a novedad porque nunca leyeron sobre la ingente cantidad de pueblos que formaron la vieja Europa.  

Nuestra vieja Europa la hicieron los francos en Poitiers, al frenar la expansión musulmana que ya había pasado como una exhalación por España. Ya en las crónicas que relatan la batalla se habla de "europenses" para referirse a la alianza de francos y germanos que lucharon contra los musulmanes. Puede que el cronista quisiera referirse con el gentilicio "europense" a esa alianza. O puede que quisiera marcar la diferencia entre el mundo que quedaba al norte de los Pirineos y que mantenía la herencia de Roma en cuanto al modo de luchar y las leyes, frente al Islam que se expandía. 


La vieja Europa la hicieron los españoles en las Navas de Tolosa. Se hizo en Lepanto, también. La hicieron austriacos y españoles en Viena, en 1529. Volvieron a hacerlo en 1683. Y sí son batallas. Porque el mundo es -también- fruto de batallas. Porque Europa se hizo con batallas y contra el Islam. A pesar de que la corrección política imponga el olvido. 

Aunque esta vieja Europa acomplejada comienza a olvidarse de dónde viene, Europa se hizo bajo una cruz. 

La cruz la llevaban los cruzados en Jerusalén y Hernán Cortés en Otumba

Por supuesto que la cruz generó fanatismo, autos de fe y herejes quemados. Pero generó a San Anselmo, Santo Tomás y Guillermo de Ockham. Y también nos dio a David Hume, o a Erasmo de Rotterdam. Porque entre libros, sangre y catedrales se creó aquello que un día se llamó -sin pudor ni vergüenza- Cristiandad.  

Bajo una cruz nos hicimos. Para bien y para mal. Con luces y sombras. Nos matamos por ella, pero creamos el mundo más libre. Llámese Cristiandad, Occidente, la vieja Europa o la etiqueta menos ofensiva posible que se les antoje. No es cuestión de creencias religiosas, aunque se confunda. Se puede ser cristiano y ateo.

Por esta razón, cada vez que veo una cruz, le echo una mirada cómplice y sonrío. Y me acuerdo de dónde vengo.  



29 comentarios:

Ángel dijo...

Mientras tanto, veintiún cristianos muertos (por lo menos) en una iglesia copta de Alejandría. El atentado de un musulmán, no sé si hace falta aclararlo.

Bien, Alejandría no es Europa, pero está en sus orígenes también.

ed dijo...

La emancipación intectual del hombre es lo que desarrollo Europa, muy a pesar de la iglesia que nos sumerjio en 15 siglos de oscurantismo.

¿Que tenemos que agradecer a la cruz?
¿El retraso científico?.
¿El encubrimiento de pedofilos?.
¿La caída del imperio?.

Podemos ver las consecuencias del pensamiento mágico en el islam, que retrocedió a la edad media Europea y sigue en ella.

Ángel dijo...

Estoy perfectamente de acuerdo con Ed, siempre y cuando él haya estudiado en un centro religioso: su ortografía es tan nefasta que, en tal caso, parecería confirmar lo de que la Iglesia nos sumergió (se escribe así, Ed) en el oscurantismo.

Por otra parte, no veo muy claro por qué quince siglos, y no diecisiete o catorce. Será que soy muy lerdo, o algo así.

A todo esto, ¿qué entiende Ed por "retraso científico"? ¿Respecto a quién o qué? ¿? Y por otro lado, ¿qué "caída del imperio"? ¿Cuál imperio? ¿Pretendía ser irónico?

En fin, no sigo, que me da pereza...

ed dijo...

Estupendos argumentos angel, efectivamente no te enteras de nada.

Ángel dijo...

Mira, Ed, se escribe Ángel. Es muy fácil, solo hace falta tener un poquillo de cuidado al mirar el qwerty. Bueno, eso y saber ortografía, claro.

Procuro rebatir con argumentos a quien los ha dado antes. Te recomiendo que leas en fuentes variadas, va muy bien. Ah, pero fuentes de cierta solvencia, claro. No te precocupes: con el tiempo se llega a discernir, y ya hasta se puede opinar con criterio.

De nada.

Juan Pablo Arenas dijo...

La liberación del hombre vino de la Iglesia y desde la Iglesia y a pesar de la Iglesia y contra la Iglesia.

Aunque se quiera creer que personas como Galileo, Montesquieu, o John Locke venían de Venus y habían mamado una civilización distintas lo cierto es que no es así. Todas esas cabezas ilustres se criaron en ambientes profundamente cristianos y fue desde la moral cristiana que desarrollaron sistemas de pensamiento que, poco a poco, acabaron con la supremacía del pensamiento religioso.

Aunque Tomás de Aquino pensara en términos religiosos, fue su esfuerzo de intentar explicar la fe a través de la razón lo que condujo a una evolución del pensamiento occidental.

Es una simplificación reduccionista decir que la Iglesia es culpable de todo el oscurantismo, porque también Genghis Khan era oscurantista y era pagano.

Detrás del éxito económico y social del mundo anglosajón está la moral calvinista como bien explicó Max Weber.

Acontecimientos como terminar con la esclavitud tuvieron una raíz cristiana; al igual que los escritos de Bartolomé de las Casas. O el nacimiento de los derechos del hombre que surgió con una larga charla entre el padre Las Casas y Ginés de Sepúlveda en Valladolid.

Países profundamente religiosos como Estados Unidos son mucho más libres y dan más oportunidades a la libertad individual que otros más laicos como Bolivia.

Y por supuesto que hubo curas fanáticos que vanagloriaban a los caudillos carlistas, de igual modo que muchos curas vascos hablan de los terroristas etarras con sospechosa simpatía. Y hubo mucho cura confesor que susurraba fanatismo en las orejas de muchos reyes.

Pero hace más de 200 años que la Iglesia Católica no segrega fanatismo y aguanta las ofensas con bastante tranquilidad al contrario que religiones como el Islam que no transigen con ninguna crítica.

Además, decir que la Iglesia produce pederastas es tan simplista como decir que las Federaciones de Deporte, los Boyscouts o las familias producen pederastia. De hecho, el mayor índice de abusos sexuales y violaciones viene siempre de familiares. Por lo tanto, la familia es un nido de pederastia.

El retraso científico es una afirmación descontextualizada que siempre se suele referir a la pugna entre Galileo y el papa. Y fue Urbano VIII quien lo protegió al principio y la polémica tuvo más que ver con envidias de los jesuitas que al propio Papa, quien ni siquiera firmó su condena.

Pero hubo religiosos corajudos que se dejaron la piel por sus fieles como los jesuitas paraguayos defendiendo guaraníes en el siglo XVIII o las misiones dominicas y franciscanas que eran deficitarias para la Corona Española y que solo se mantuvieron abiertas por la presión de los religiosos.

Con los muchísimos peros que se le pueden poner a la civilización cristiana -que es la nuestra- es la que ha dado el mundo más libre que nunca jamás hayamos conocido.

Y como ejemplo el botón de la bomba en Egipto contra cristianos. Es el Islam la religión oscurantista. El Cristianismo hace muchos siglos que perdió ese papel. Pero el relativismo siempre es difusor, -y oscurantista- diluyendo las culpas.

Tobias dijo...

La cruz también sirve para espantar a los vampiros, jajaja.
He de reconocer que la argumentación de Ed me parece infantil, pero la contra de Ángel es una invitación a bronca y no a una discusión constructiva.
Me gusta la comparación entre los USA y Bolivia. Arabia Saudí también hubiese podido valer. En libertades individuales no creo que en la vieja y malvada Europa relativista y multicultural tengamos mucho que envidiar a los EEUU.
Sí, venimos de la cruz y espero que sigamos quedandonos las cosas buenas que nos ha dado y deshaciendonos del lastre que aún lleva cargando.
Feliz año JP!
T

Juan Pablo Arenas dijo...

Habría sido mejor el ejemplo de EEUU y China que es el colmo de la sustitución de una religión por la religión estatal.

Y claro que Europa se parece mucho en libertades a EEUU, de hecho es el mismo mundo. Y claro que quiero quedarme con lo mejor de la cruz y perder lo peor de ella.

Pero sin olvidar de dónde proviene mi mundo. De esa cruz.

Es una cuestión de memoria, no de exaltación católica.

JP.

Ángel dijo...

Hombre, Tobías, bronca no, no busco eso. Pero es que argumentos --en el sentido estricto de la palabra-- tampoco había en el comentario al que he respondido. De acuerdo que la respuesta llevaba ironía, pero nada más... Luego ha llegado Oyarzun, con cuya intervención (la larga de antes) estoy muy de acuerdo, así que no me extenderé más. Por cierto, llevas razón en lo de que, mira por dónde, la cruz como poco sirve para espantar vampiros. Ya con zombies y otros bichos de esos que tan de moda están, no sé... Ah, y también servía para atizarse castañazos en "Bandas de Nueva York", es otro uso posible...

Hala, feliz año.

ed dijo...

Gracias Juan por tu argumentación, la memoria esta presente y actúa, ojala habláramos de antropología, la cruz los representa y estoy de acuerdo en no olvidar de donde venimos.

La muerte de Hypatia y la destrucción de la nueva Biblioteca de Alejandría (contemporáneas pero no relacionadas) suponen el asalto y victoria de la religión sobre la ciencia helenística. El cristianismo, infiltrado en el Imperio Romano, degenera en su religión oficial y única. De forma paralela a la persecución del paganismo, se impone la verdad religiosa sobre la científica.
La muerte de Hypatia supone el asalto de la religión a la ciencia
"No debemos ver la de Alejandría como una biblioteca moderna, como un almacén de libros y pergaminos, que los había y muy valiosos", dice Félix Ares, asesor científico del museo de la ciencia Kutxa Espacio y destacado escéptico. "Lo más cercano que tenemos para hacernos una idea es nuestro Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Allí se estudiaba y se investigaba. Descubrieron las causas de las mareas y plantearon conceptos modernos, como el de la gravedad", explica.
En la ciudad egipcia, una mezcla de culturas egipcia, griega, romana y oriental, la ciencia era un disciplina impulsada por el poder, no fruto de sabios individuales. "Allí hicieron las primeras disecciones del cuerpo humano. En la Biblioteca, tenían hasta un jardín botánico con la misión de seleccionar y mejorar las semillas", recuerda. "Todo eso no se vuelve a recuperar hasta hace siglo y medio", asegura Ares.
La muerte de la matemática seguidora de Platón y la destrucción de la Biblioteca ponen fin a la ciencia de tradición helenística. Se impone desde entonces una única verdad, la religiosa, con la que los científicos deben convivir.
Desde el emperador Constantino, se produce un intenso monopolio por parte del poder religioso. De hecho, la filosofía y la ciencia (por entonces términos equivalentes) son asimilados por la religión. Los escasos avances científicos son obra de actores individuales, la práctica totalidad salidos de la esfera religiosa.
Bacon, la primera fisura
Aunque los historiadores no se ponen de acuerdo sobre las causas reales de su caída, el filósofo y científico Roger Bacon supone, a ojos de muchos, la primera fisura en la monolítica irracionalidad de la Iglesia. Aunque había leído a Aristóteles, el único gran filósofo griego respetado por el cristianismo, Bacon apostó más por la experiencia que por las teorías. Defendía la experimentación como forma para conocer el mundo. De hecho, es considerado el precursor del método científico siglos antes que René Descartes. Pero Bacon acabó encarcelado. Hay quienes sostienen que se debió a su conocimiento y praxis de la alquimia árabe, considerada una práctica herética. Otros consideran que fue víctima del enfrentamiento entre las órdenes franciscana y dominica

ed dijo...

Con Bacon sucede algo habitual entre los científicos que erosionan la religión: son miembros de la Iglesia o, como Copérnico, tienen formación religiosa y la practican. Sin embargo, los trabajos y la posición del inglés caen en el olvido.
Galileo se quedó ciego de mirar al Sol para descubrir que mutaba
"Es con el Renacimiento cuando surge una oposición sistemática al control del conocimiento", explica el profesor de Filosofía de la Universidad de Oviedo y miembro de la Sociedad Asturiana de Filosofía, Alberto Hidalgo, muy activa en el combate de la pseudociencia. "Es a partir de aquí cuando se inicia el retroceso de la religión y la progresiva recuperación de espacios por parte de la ciencia", añade.
Hidalgo recuerda que, al principio, el poder religioso intenta contemporizar. Así, cuando Copérnico, ferviente creyente, publica su De revolutionibus orbium coelestium (De las revoluciones de las esferas celestes) en 1543, Roma ni se inmuta. La obra, que inicia la revolución científica y es la base de la astronomía moderna, es un compendio de una vieja teoría que ya sostenían los antiguos griegos: es la Tierra la que gira alrededor del Sol y no al revés, como se empecinan en sostener los religiosos.
Galileo Galilei
La espiritualidad se basa en procesos neuronales, en la materia
"La Iglesia nunca lo declaró herético, sólo era una teoría más", recuerda el astrónomo del Instituto de Astrofísica de Andalucía del CSIC Emilio García. Tuvo que llegar Galileo Galilei, otro ferviente creyente, para demostrarla en 1609 con el telescopio que había creado y, con ello, despertar la persecución religiosa. De hecho, es el siglo XVII, y no la Edad Media, la era de quema de científicos por herejes, como Giordano Bruno o Marco Antonio de Dominis (ver apoyo).
"Galileo construyó el mejor telescopio de entonces y se puso a mirar al cielo", rememora García. Comprobó que el planeta Venus presentaba fases, algo sólo explicable si orbitaba alrededor del Sol. También descubrió las lunas de Júpiter, que también giraban a su alrededor. "Hechos que validaban la teoría de Copérnico", destaca. La historia es conocida,
Tras obligarle a retractarse, Galileo fue recluido de por vida y se le prohibió escribir. Al final de sus días, estudió el Sol (tanto que se quedó ciego de observarlo) hasta descubrir que ni siquiera el astro rey era inmutable

ed dijo...

Poco a poco, las verdades religiosas fueron cayendo. En su demolición, además de la astronomía, vino a ayudar la geología. "¿Cómo se puede explicar que aparezcan conchas de almejas en el monte Olimpo?". Esa pregunta, que hace Félix Ares, también intrigó a los geólogos de la Ilustración y principios del siglo XIX. La búsqueda de fósiles, que llegó a convertirse de moda, y el estudio de los cambios en la superficie terrestre arrojan a la basura las afirmaciones bíblicas sobre la edad de la Tierra y su inmutabilidad. La aparición de enormes restos de especies extinguidas acaba por hundir el Arca de Noé. En la Iglesia reculan, empiezan a rechazar la interpretación literal de la Biblia.
Pero el golpe de gracia lo da la biología. Charles Darwin y Alfred Russel Wallace, de nuevo dos personas muy religiosas, aprovechan la acumulación de evidencias y la experiencia propia para postular la Teoría de la selección natural. Todas las especies, el hombre incluido, tienen un origen único y se han ido diferenciando a lo largo del tiempo por medio de cambios adaptativos. "Ya no hay diseño inteligente, sólo una evolución al azar por selección natural", dice García. Pero como los anteriores científicos, Darwin sufrió el escarnio y desprecio del poder religioso. Aunque ya no estaba de moda quemar científicos.
Es en la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX cuando el poder religioso siente su verdad más amenazada. A la par que el evolucionismo, las ideologías políticas basadas en el materialismo merman la autoridad moral de la Iglesia sobre los hombres. "Algunos Estados, como la Prusia de Bismarck, se apoyan en la ciencia para disputarle el monopolio cultural a la Iglesia", comenta Hidalgo.
El golpe de la física
Desde que Newton, enésimo creyente, pusiera las bases de la física moderna, sosteniendo que las mismas leyes que rigen en la Tierra gobiernan el cosmos, la religión sólo ha recibido palos de los físicos. Con la trinidad formada en el siglo XX por la Teoría de la relatividad general de Einstein, la mecánica cuántica y las diferentes versiones de la Teoría de cuerdas, reformuladas ahora por Hawking en la Teoría M, el Universo ha dejado de ser uno y surgió de la nada. "Con las ideas sobre los multi universos, el proceso de destronamiento de la religión iniciado por Copérnico empieza a completarse. Ni somos el centro ni somos únicos", opina García.
La astronomía, geología, biología, física, pero también la medicina o la sociología han aportado sus palas para horadar el edificio religioso. La última es la neurociencia. La mayoría de las religiones apoyan la idea de un alma diferente de la materia. Pero se acumulan los experimentos que muestran cómo el amor, la moralidad, la espiritualidad tienen su base en procesos neuronales, en la materia, que no necesitan de un espíritu.



Respecto a la pederastia, les acuse de encubridores (no de producirlos, creo que hay mucha diferencia), con el sumo sacerdote a la cabeza como cardenal y papa, también esta siendo investigado el banco vaticano por lavado de dinero para la mafia (relación de antaño).

Os recomiendo si tenéis estomago este documental, suficiente a mi entender para que intervenga el tribunal de la Haya .. http://www.youtube.com/watch?v=Bgf7WT9flHI&feature=player_embedded

ed dijo...

Poco a poco, las verdades religiosas fueron cayendo. En su demolición, además de la astronomía, vino a ayudar la geología. "¿Cómo se puede explicar que aparezcan conchas de almejas en el monte Olimpo?". Esa pregunta, que hace Félix Ares, también intrigó a los geólogos de la Ilustración y principios del siglo XIX. La búsqueda de fósiles, que llegó a convertirse de moda, y el estudio de los cambios en la superficie terrestre arrojan a la basura las afirmaciones bíblicas sobre la edad de la Tierra y su inmutabilidad. La aparición de enormes restos de especies extinguidas acaba por hundir el Arca de Noé. En la Iglesia reculan, empiezan a rechazar la interpretación literal de la Biblia.
Pero el golpe de gracia lo da la biología. Charles Darwin y Alfred Russel Wallace, de nuevo dos personas muy religiosas, aprovechan la acumulación de evidencias y la experiencia propia para postular la Teoría de la selección natural. Todas las especies, el hombre incluido, tienen un origen único y se han ido diferenciando a lo largo del tiempo por medio de cambios adaptativos. "Ya no hay diseño inteligente, sólo una evolución al azar por selección natural", dice García. Pero como los anteriores científicos, Darwin sufrió el escarnio y desprecio del poder religioso. Aunque ya no estaba de moda quemar científicos.
Es en la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX cuando el poder religioso siente su verdad más amenazada. A la par que el evolucionismo, las ideologías políticas basadas en el materialismo merman la autoridad moral de la Iglesia sobre los hombres. "Algunos Estados, como la Prusia de Bismarck, se apoyan en la ciencia para disputarle el monopolio cultural a la Iglesia", comenta Hidalgo.
El golpe de la física
Desde que Newton, enésimo creyente, pusiera las bases de la física moderna, sosteniendo que las mismas leyes que rigen en la Tierra gobiernan el cosmos, la religión sólo ha recibido palos de los físicos. Con la trinidad formada en el siglo XX por la Teoría de la relatividad general de Einstein, la mecánica cuántica y las diferentes versiones de la Teoría de cuerdas, reformuladas ahora por Hawking en la Teoría M, el Universo ha dejado de ser uno y surgió de la nada. "Con las ideas sobre los multi universos, el proceso de destronamiento de la religión iniciado por Copérnico empieza a completarse. Ni somos el centro ni somos únicos", opina García.
La astronomía, geología, biología, física, pero también la medicina o la sociología han aportado sus palas para horadar el edificio religioso. La última es la neurociencia. La mayoría de las religiones apoyan la idea de un alma diferente de la materia. Pero se acumulan los experimentos que muestran cómo el amor, la moralidad, la espiritualidad tienen su base en procesos neuronales, en la materia, que no necesitan de un espíritu.



Respecto a la pederastia, les acuse de encubridores (no de producirlos, creo que hay mucha diferencia), con el sumo sacerdote a la cabeza como cardenal y papa, también esta siendo investigado el banco vaticano por lavado de dinero para la mafia (relación de antaño).

Os recomiendo si tenéis estomago este documental, suficiente a mi entender para que intervenga el tribunal de la Haya .. http://www.youtube.com/watch?v=Bgf7WT9flHI&feature=player_embedded

ed dijo...

Poco a poco, las verdades religiosas fueron cayendo. En su demolición, además de la astronomía, vino a ayudar la geología. "¿Cómo se puede explicar que aparezcan conchas de almejas en el monte Olimpo?". Esa pregunta, que hace Félix Ares, también intrigó a los geólogos de la Ilustración y principios del siglo XIX. La búsqueda de fósiles, que llegó a convertirse de moda, y el estudio de los cambios en la superficie terrestre arrojan a la basura las afirmaciones bíblicas sobre la edad de la Tierra y su inmutabilidad. La aparición de enormes restos de especies extinguidas acaba por hundir el Arca de Noé. En la Iglesia reculan, empiezan a rechazar la interpretación literal de la Biblia.
Pero el golpe de gracia lo da la biología. Charles Darwin y Alfred Russel Wallace, de nuevo dos personas muy religiosas, aprovechan la acumulación de evidencias y la experiencia propia para postular la Teoría de la selección natural. Todas las especies, el hombre incluido, tienen un origen único y se han ido diferenciando a lo largo del tiempo por medio de cambios adaptativos. "Ya no hay diseño inteligente, sólo una evolución al azar por selección natural", dice García. Pero como los anteriores científicos, Darwin sufrió el escarnio y desprecio del poder religioso. Aunque ya no estaba de moda quemar científicos.
Es en la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX cuando el poder religioso siente su verdad más amenazada. A la par que el evolucionismo, las ideologías políticas basadas en el materialismo merman la autoridad moral de la Iglesia sobre los hombres. "Algunos Estados, como la Prusia de Bismarck, se apoyan en la ciencia para disputarle el monopolio cultural a la Iglesia", comenta Hidalgo.
El golpe de la física
Desde que Newton, enésimo creyente, pusiera las bases de la física moderna, sosteniendo que las mismas leyes que rigen en la Tierra gobiernan el cosmos, la religión sólo ha recibido palos de los físicos. Con la trinidad formada en el siglo XX por la Teoría de la relatividad general de Einstein, la mecánica cuántica y las diferentes versiones de la Teoría de cuerdas, reformuladas ahora por Hawking en la Teoría M, el Universo ha dejado de ser uno y surgió de la nada. "Con las ideas sobre los multi universos, el proceso de destronamiento de la religión iniciado por Copérnico empieza a completarse. Ni somos el centro ni somos únicos", opina García.
La astronomía, geología, biología, física, pero también la medicina o la sociología han aportado sus palas para horadar el edificio religioso. La última es la neurociencia. La mayoría de las religiones apoyan la idea de un alma diferente de la materia. Pero se acumulan los experimentos que muestran cómo el amor, la moralidad, la espiritualidad tienen su base en procesos neuronales, en la materia, que no necesitan de un espíritu.

ed dijo...

Respecto a la pederastia, les acuse de encubridores (no de producirlos, creo que hay mucha diferencia), con el sumo sacerdote a la cabeza como cardenal y papa, también esta siendo investigado el banco vaticano por lavado de dinero para la mafia (relación de antaño).

Os recomiendo si tenéis estomago este documental, suficiente a mi entender para que intervenga el tribunal de la Haya .. http://www.youtube.com/watch?v=Bgf7WT9flHI&feature=player_embedded


Me gustaría Ángel, darte la razón en la parte que la tienes, escribir correctamente, pero entenderás que un ataque frontal por un baile de letras cabrea.

Feliz vida a todos.

Ángel dijo...

Feliz vida también por mi parte.

Este enlace puede servir de complemento, quizás:

http://igorpu3.blogspot.com/2010/09/ciencia-contra-fe.html

Saludos a todos.

Juan Pablo Arenas dijo...

Querido Ed:

Tu furor antirreligioso te lleva a rebatir conceptos que yo no he expuesto y a mezclar churras con merinas.

Yo jamás hablé de la religión como verdad científica o como sistema de pensamiento válido para explicar lo que es una mitocondria o una fosa abisal.

Yo no dije eso. Yo me refiero únicamente al cristianismo como generador de la civilización más libre que existe. Y también dije: a pesar de la Iglesia, contra la Iglesia y todo ese acopio de preposiciones que usé.

Esas hermosas frases de "asalto y ruptura" son muy biensonantes pero no dicen nada. A los historiadores rencorosos les encantan esas fechas determinantes y zanjantes para comenzar o terminar períodos. Como el historiador de la lengua cursi que dice que el castellano nació tal día, a tal hora en el Monasterio de Silos y luego dice la cursilada de "el primer vagido del castellano". Pues no oiga. Ni las lenguas nacen en un día, ni las civilizaciones son asaltadas en un día concreto.

La pobre biblioteca de Alejandría fue quemada muchas veces, es cierto, pero eso significó menos de lo que parece. Queda muy romántico decir que la biblioteca muere y morimos todos, pero eso no es así.

Para que el conocimiento se desarrolle ha de existir una paz y una tranquilidad que suelen dar los grandes imperios y las grandes civilizaciones. Nadie se dedica a cavilar sobre la distancia al Sol, si tiene una nube de bárbaros dando catapultazos en las murallas de la ciudad. Y el mundo que iba quedando en esa época era cualquier cosa menos seguro. Quedaba Bizancio, pero al que le duró muy poco el apogeo. De hecho, eran los bizantinos quienes cavilaban sobre el sexo de los ángeles mientras los turcos asaltaban Constantinopla. Así les fue a mis amigos los bizantinos.

El resto de Europa estaba hecho unos zorros y asolado por bárbaros que despreciaban bastante el conocimiento y que, aunque se hubiesen encontrado todo lo que se quemó en Alejandría, no habrían sabido qué hacer con ello. A los visigodos sí que les gustó el legado cristiano y romano y lo asimilaron. Y léete algo sobre los misioneros irlandeses que guardaron manuscritos griegos y latinos salvaguardándolos de los vikingos y otros bárbaros que, aunque no quemaron la biblioteca de Alejandría, eran bastante brutos.

Juan Pablo Arenas dijo...

Claro que las religiones monoteísticas han segregado fanatismo. Pero también muchos sistemas políticos que nada tenían de religiosos han sido igual o más perniciosos que la religión cristiana. Léete lo que hizo Genghis Khan en Bagdad en 1258 y sin creer en ningún dios cristiano. También hay regímenes muy laicos y antirreligiosos como el comunismo que se han pasado -y siguen-quemando libros y llevando a los escritores a los gulag. Y eso que el marxismo iba a salvar el mundo. Como ves, en todas partes cuecen habas.

Hacer historia-ficción con lo que habría pasado si no se hubiera quemado la biblioteca es muy divertido, pero inútil. Quizá los cristianos no la habrían quemado, pero luego los francos habrían sucumbido en Poitiers en el 732 y ni tu ni yo, quizás, estaríamos teniendo esta conversación. Y toda Europa se parecería a un país islámico y viviríamos como hace 1.000 años o más atrás-. Porque el Islam no tendría el contrapeso del Cristianismo.

Por supuesto que muchos avances se hicieron a pesar de la Iglesia, pero es que eso está dicho en lo que escribí. Pero nacieron en la civilización cristiana y no al margen de ella, que es lo que yo quiero destacar. Los mundos que son libres -o más o menos libres- crean disensiones en su seno y crean diferentes trayectorias. Por eso son libres.

La discusión entre ciencia y fe hace mucho que la perdió la fe y yo me alegro de ello. Pero yo no hablaba de eso.

Yo hablaba de cristianos muertos en la Reconquista española. De cristianos muertos en las llanuras del Duero. De cristianos muertos en los campos de Jaen. Y todos peleando contra el Islam. Yo hablo de más de 1.000 años de historia que hicieron posible meter a España en Europa y en Occidente. Aunque ahora suene centralista y fascista, fueron esos cristianos muertos,que combatían bajo una cruz, quienes permitieron que ahora tu y yo escribamos en este blog y no nos ahorquen por ello.

Porque hoy, en el siglo XXI, el fanatismo no es del cristianismo sino del Islam. Y de regímenes como el de China. Pero en los países cristianos se puede hablar en libertad y escribir en libertad. Y esa libertad provino, entre otras cosas, de la religión cristiana de cuya civilización todos formamos parte.

Algunos dirán que reniegan de ella. Yo me enorgullezco de formar parte del mundo libre. Ya que no aprecia la libertad quien siempre la tuvo.

ed dijo...

Lo siento, no consigo abstraer la cruz de la iglesia, no así de las creencias.

Quizás sea por un cierto dogmatismo ateo, pero no lo consigo.

Enhorabuena por tu blog, aunque discrepe se valorarlo, una opinión distinta siempre es mas enriquecedora que una palmadita en la espalda.

Juan Pablo Arenas dijo...

Pues entonces admites que haces algo que no deberías hacer. Eso tiene un nombre: irracionalidad.

Conozco esa irracionalidad. Se llama anticlericalismo y es una opción tan absurda como ser antiarroz o antigrifos porque un día te estalló una tubería o porque se te indigestó una paella.

Como ves la irracionalidad no es exclusiva de las religiones, ya que los hombres estamos llenos de irracionalidad.

La religión existe por esa necesidad -irracional- de creer en consuelos y calmantes ante la inmensidad del universo.

Como ves, al final recurres a argumentos irracionales para combatir la irracionalidad. Con lo cual, no has avanzado mucho.



Como ves, el hombre recurre a la irracionalidad y a las corazonadas y a las intuiciones cuando la lógica se le agota.

Como ves, la irracionalidad anida en nuestras almas o mentes y explica bastante bien por qué las religiones perviven.

Si no quieres discernir entre cruz e Iglesia, aunque crees que deberías hacerlo, ¿cómo te puede extrañar que haya quien crea en Dios, aunque no debería hacerlo.

Como ves, estamos plagados de irracionalidad y de comportamientos míticos. Igual que la religión.

Juan Pablo Arenas dijo...

Hay otra perlita, Ed, del artículo del diario Público que tuviste a bien pegar aquí.

Se trata del "cristianismo infiltrado en el imperio romano". Eso es pura socialdemocracia. Cuando la gran masa hace algo que al socialdemócrata no le gusta, se refiere a ella como un ser débil, manipulado, azotado por fuerzas que escapan a su control. La masa es un perrillo tonto que mendiga entre la basura.

Pero si la masa hace cosas del agrado del socialdemócrata, entonces la masa es rebelde, dinámica y gallarda. Y proclive a las buenas revoluciones.

El cristianismo llegó a ser religión oficial cuando el imperio romano comenzaba a caerse a cachos. Y fue la masa -libremente-quien la hizo suya porque tenía muchos elementos que le gustaban. Si ahora hay millones de personas que siguen libremente a los telepredicadores, ¿extraña que el cristianismo se extendiera en Roma entre esclavos, legionarios y patricios?

Al socialdemócrata le gusta ver conspiraciones judeo-masónicas. Porque le explican mejor el mundo dividiéndolo en una pobre masa tonta y un dominante rico y malvado.

Es el cuento eterno de Blancanieves y la Madrastra.

Ángel dijo...

Por otra parte, la práctica del cristianismo en el Imperio Romano se reconoció a principios del s. IV, si no me falla la memoria, y muy probablemente contribuyó a clausurar una situación de debilidad imperial que se arrastraba desde hacía un siglo largo. Durante ese período, la debilitación del mundo romano (el occidental, sobre todo) fue muy seria. Extremadamente seria. No había manera de hacer nada entre continuas banderías de sectores del ejército o de las oligarquías interesados en alimentar sus propios intereses, a menudo de muy escasa longitud de miras. Los emperadores eran de quita (normalmente con los pies por delante) y pon (a menudo mediante sobornos varios). Vamos, un cachondeo. No digo yo que la Iglesia o el papado tuviesen un efecto balsámico, sino que les tocó entrar definitivamente en el tablero de la partida de la historia, y que los emperadores se apoyaron en ambas instituciones para buscar --y lograr-- estabilidad. Una estabilidad que diferenció en mucho el siglo IV del III. La verdad: no sé qué tiene eso de malo...

Otra cuestión (subrayo: otra) es si la Iglesia se aprovechó en un mal sentido de esa situación, si la doctrina primigenia se emponzoñó en jerarquías malignas que llegan hasta hoy, si la pureza y la simplicidad de otrora pasaron a mejor vida, etc., etc.

Ya me disculparéis si repito ideas que se han sacado al tablero, he leído los anteriores comentarios tan solo en diagonal.

Ángel dijo...

Aunque también habría que reconocer, Sr. Oyarzun, que lo de que la masa aceptase "libremente" la religión cristiana habría de matizarse. Dependiendo, claro, de lo que se entienda por "libremente". Se puede ejercer presión sobre los individuos para que acepten aquello que, socialmente, les resulte más cómodo o rentable, como vemos hoy mismo.

Es decir: que "libremente", pero no tanto, desde el momento en que esta religión se oficializó o semioficializó.

Pero eso, ¡ay!, me temo que venga dado por la condición humana, más que por la cruz, la no cruz o el Papa de Roma...

Juan Pablo Arenas dijo...

Yo creo que, para bien o para mal, los hombres han elegido su destino.

Quizá cuando el cristianismo era religión oficial ya no había opción de elegir, ¿pero antes?

Yo no acabo de ver esa tendencia a considerar a las generaciones anteriores como incapacitados que siempre fueron víctimas de conspiraciones diabólicas para llevarlos por el mal camino. Lo cual termina siempre en el sabio siglo XX donde sí que alcanzamos la sabiduría absoluta y donde sí sabíamos perfectamente quién nos engañaba.

Yo creo que -con todas las matizaciones que se quieran- el ser humano escogió las más de las veces el camino que iba a seguir. Tanto para bien como para mal. Y siempre dentro del tiempo que les tocó vivir. Como tampoco es muy habitual que una señora de hoy en día se vaya los domingos a una iglesia donde exista el culto a Mitra. Lo normal es que vaya a un templo católico, protestante o testigo de Jehová.

Ángel dijo...

Antes sí, por supuesto, había libertad de elección, y además uno se jugaba el tipo eligiendo... Luego las tornas mudaron notablemente, no te quepa duda. El cristianismo como religión de poder es ya otra cosa. También ahora hay libertad de elección, plena. Un "ahora" que en algunos países de nuestro alrededor (Francia, Alemania) abarca desde el s. XIX. O sea, un "ahora" ya veterano... A nadie obligan los católicos a nada, por más que se diga. A nadita. Al menos en la generalidad de los países occidentales. Por eso, muchos --no todos-- los ataques a la cruz y/o al catolicismo son lanzadas a moro muerto. Es muy fácil darlas así... Ahora que no sólo no se corre riesgo por atizar, sino que además está de moda...

En cuanto al s. XX, ha sido de una jactancia tremenda. También lo fue el XIX, al menos en su segunda mitad. Jactancia. En efecto, una especie de "antes eran tontos, ahora sí que hemos espabilao y nuestras soluciones son las fetén", que junto a muchos avances técnicos indiscutibles y maravillosos han traído unas calamidades tremendas.

ed dijo...

Uf.. política y religión, esto puede ser eterno, me interesa pero no tengo tiempo de contestar a todo, haré lo que pueda.

Te tengo que reprender Juan por tragiversar mis palabras por segunda vez.
Te equivocas, no odio a nadie por lo que es, sino por lo que hace. Me conformo con un estado laico.

La iglesia se basta solita para auto destruirse, el papa es el mejor aliado del ateísmo ahora mismo.

En cuanto a la cruz; si veo la media luna pienso en el islam, la hoz y el martillo en el comunismo.
Puedo pensar en segundo plano en su cultura y en la gran Rusia, pero la primera reflexión es esta indudablemente .

Un saludo.

Juan Pablo Arenas dijo...

Querido Ángel:

En dar lanzadas a moro muerto somos especialistas. No hay más que ver la cantidad de millones de antifranquistas que surgen ahora. Yo quisiera ver dónde estaban antes del 75. Y al final resultará que tampoco nadie desfiló ni lloró delante del féretro del caudillo.

Como los millones de insultos que profieren en los vídeos de Youtube sobre Franco. Qué machitos son a moro muerto. Yo habría querido ver esa hombría en el 42.

Pero ser anticlerical es tan molón como ser feminista o ecologista: unos discursos simplones basados en unos cuantos titulares y que no comprometen a nada. Tenía mérito presumir de bizarría cuando tocaba aprenderse el catecismo en pleno franquismo.

Querido Ed:
Yo no tergiverso tus palabras. Quizá te falta precisión al explicarte. Solo analizo lo que escribes.

Tener comportamientos irracionales no nos convierte en idiotas. Eso creo yo. Todos los tenemos. De hecho, la simpatía por uno más que por otro se suele basar en comportamientos irracionales. Todo lo que se cae bajo el influjo del verbo "caer" es irracional: "me cae bien o mal".

Las conductas están ahí. Y tu puedes espantarte porque la religión es una muestra de irracionalidad y jactarte de que tú no lo eres, pero si analizas tus actos verás que sí lo somos.

El glorioso mundial de fútbol fue toda una procesión religiosa en que los jugadores portaban la cruz (trofeo) y eran aclamados por los fieles (seguidores). Todos querían tocar la cruz o trofeo y todos portaban la ropa propia de la cofradía o camiseta de la selección.

Como ves, la necesidad de rituales irracionales es siempre constante. Y no lo digo desde la altivez: yo tomé parte activa en ese delirio colectivo y saqué mi bandera de España, y aclamé a mi selección y quise tocar la cruz o trofeo.

Y no me considero un imbécil por eso. He conocido a cientos de descreídos apátridas esnobísimos que tenían bastante poquito en la sesera. Muchas intuiciones y pocos libros leídos.

En cuanto a la hoz y el martillo yo no veo comunismo. Yo veo millones de locos aniquilando una clase social en su delirante búsqueda del paraíso en la tierra. Sustituyendo al Mesías de Galilea por un ruso de nombre Stalin. Y haciéndole altares y metiendo a los herejes en gulags de Siberia. Los millones de muertos de esa locura son difíciles de enumerar.

Ya ves que la percepción está siempre mediatizada por los conocimientos y los sentimientos.

Sigamos todos con salud.

JP.

Anónimo dijo...

Además, decir que la Iglesia produce pederastas es tan simplista como decir que las Federaciones de Deporte, los Boyscouts o las familias producen pederastia. De hecho, el mayor índice de abusos sexuales y violaciones viene siempre de familiares. Por lo tanto, la familia es un nido de pederastia.

Anónimo dijo...

La mayoría de las religiones apoyan la idea de un alma diferente de la materia. Pero se acumulan los experimentos que muestran cómo el amor, la moralidad, la espiritualidad tienen su base en procesos neuronales, en la materia, que no necesitan de un espíritu.